Si hay algo que se considera mayor consenso entre el técnico Erik ten Hag y la afición del MU es la negativa a fichar a Mauro Icardi procedente del PSG en el primer verano del estratega holandés.

Pero si alguien puede causar dolor a los Red Devils en el enfrentamiento contra el Galatasaray, ese es el delantero argentino, que marcó el gol decisivo en el minuto 81 del partido de ida para hundir al equipo de Erik ten Hag.

Es una de las figuras que más dividen allá donde va, un veneno para los equipos que quieren estabilidad y, después de estar hartos de nombres como Pogba, los que aman al equipo. La camiseta roja se asustó cuando la dirigencia de MU quiso traer a Icardi al Viejo. Trafford.

“Este equipo está intentando destruirse a sí mismo”, comentó alguien en las redes sociales el pasado verano. Mientras que otro escribió: “Ni siquiera necesitas un equipo de ojeadores o cerebro para saber que no puedes tener ni a Icardi ni a Pogba en la plantilla, eso sería tóxico”.

El veneno que temían los aficionados de MU no fue “inyectado” en el vestuario del equipo. Pero al final, de alguna manera, los Diablos Rojos quedaron envenenados, como se mencionó anteriormente, con Icardi anotando justo en el Teatro de los Sueños, y existe la posibilidad de volver a hacerlo en casa del Galatasaray.

Detener a un Icardi que es feliz tanto en su vida personal con su esposa Wanda Nara como en su gran forma goleadora será un gran desafío para el sistema defensivo de Erik ten Hag. Con jugadores como Wilfried Zaha, Dries Mertens y Tete apoyando el ataque, Icardi es muy difícil de frenar.

O el equipo rojo puede hacerlo durante la mayor parte del partido, pero en un determinado momento decisivo, este delantero de personalidad muy difícil de controlar y le gusta correr riesgos se convertirá en un auténtico asesino MU.

“Estoy muy feliz en el Galatasaray. Venir aquí me dio la oportunidad de demostrar mi valía, como siempre lo hago. Me estoy marcando nuevas metas. Desde el principio me sentí como si estuviera en “Algunas personas creen que si “Juegas al fútbol en Turquía, no estás en el nivel de élite del fútbol europeo y estás retrocediendo”, dijo Mauro Icardi antes de enfrentarse nuevamente a MU con el objetivo de romper la red rival para ayudar al Galatasaray a tener una ventaja en la carrera por ganar un billete para la segunda ronda eliminatoria del Grupo A.

El delantero de 30 años tiene claramente la opinión contraria. Marcó 15 goles en 20 partidos desde el comienzo de la temporada, marcar goles es algo natural para Icardi. Siempre intenta estar en la mejor posición y en cuanto haya media posibilidad, el número 9 marcará.

Es alguien que tiene en su ADN la concentración necesaria, la estabilidad y el instinto goleador, que es la personalidad de un gran cazador, algo que los actuales delanteros de Erik ten Hag no tienen.

“Me siento muy bien. Quiero demostrar lo que puedo hacer y esto me hace sentir que estoy en modo goleador contra el MU”, dijo Icardi antes del partido. Y esta noche sólo quiere hacer una cosa: convertirse en un veneno para los Diablos Rojos.