La famosa actriz pasó meses en el set de rodaje sin ninguna línea de diálogo con un George Miller que quería que hablara con la mirada.

Cada vez falta menos para que podamos disfrutar de ‘Furiosa: de la saga Mad Max’ en salas de cine, por lo que las entrevistas promocionales de sus protagonistas están a la orden del día.

Buena prueba de ello son unas recientes palabras de su actriz principal, Anya Taylor-Joy, que ha reconocido la dureza de uno de los rodajes más exigentes de su carrera y que tiene que ver con sus escasas 30 líneas de diálogo en toda la película.

Nunca me había sentido tan sola”, ha declarado la actriz a The New York Times tras pasarse varios meses en el set prácticamente sin pronunciar palabra.

Anya Taylor-Joy y su silenciosa Furiosa

“Nunca me había sentido tan sola como al hacer esta película. No quiero profundizar demasiado, pero todo lo que pensé que sería fácil fue difícil”, explica la actriz tras reconocer que se pasó meses sin pronunciar palabra en el set de rodaje.

“Siguiente pregunta, lo siento. Hablamos en 20 años”, repite Taylor-Joy para no profundizar en tan dura situación para la gran mayoría de intérpretes.


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Y es que según parece, George Miller apostaba más por la comunicación corporal, especialmente por la expresividad de las miradas, que por los diálogos entre personajes;

“George tenía una idea muy, muy estricta de cómo se veía el rostro de guerra de Furiosa, y eso solo me permitía usar los ojos durante una gran parte de la película.

Era como ‘boca cerrada, sin emoción, habla con los ojos’. Eso es todo, eso es todo lo que tienes”, continúa la actriz.

Aun así, Anya Taylor-Joy logró convencer a George Miller para que su personaje expresara toda su rabia contenida en una escena en la que Furiosa estalla de ira: “Soy una gran defensora de la ira femenina.

Somos animales, y hay un punto en el que alguien simplemente estalla. Hay un grito en la película, y no estoy bromeando cuando te digo que luché por ese grito durante tres meses”, concluye la actriz.