Hoy les traemos una noticia que está dando la vuelta al mundo y dejando a todos sin palabras. Thiago Messi, el hijo del legendario Lionel Messi, acaba de lograr algo increíble que ha paralizado el mundo del deporte.

Créanme, lo que van a escuchar no tiene precedentes. Prepárense, porque lo que les voy a contar no solo cambiará la historia del fútbol, sino que marcará el inicio de una nueva era en este deporte.

Un récord que nadie se esperaba y una hazaña que ni siquiera los más grandes del fútbol podrían haber imaginado. A su corta edad, Thiago Messi ha hecho historia.

Pero antes de seguir con esta fascinante historia, si usted es un auténtico fan de Lionel Messi y quiere apoyar a su hijo en esta emocionante carrera que está comenzando, no olvide suscribirse a Celebrity Última Hora y activar la campanita.

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El 10 de septiembre de 2024 es una fecha que quedará marcada para siempre en los anales del deporte. Y no precisamente por Lionel Messi. Esta vez, el protagonista no fue el astro argentino, sino su hijo mayor, Thiago Messi.

Lo que parecía ser un simple partido escolar entre jóvenes promesas, terminó siendo un espectáculo que dejó atónito al mundo entero.

Todo ocurrió en el pequeño estadio de una escuela, pero el impacto fue tan grande que rápidamente se viralizó en las redes sociales y llegó a los titulares de los medios deportivos de todo el planeta.

Thiago Messi, quien participaba en una liga juvenil con su equipo escolar, se enfrentó a uno de sus principales rivales en un partido que, si bien no era de nivel profesional, se jugó con una intensidad digna de una final de Champions League.

Las expectativas eran altísimas, no solo porque Thiago lleva uno de los apellidos más pesados del fútbol mundial, sino porque en las últimas semanas había mostrado un crecimiento impresionante en su juego. Lo que nadie esperaba es que este joven, a sus 7 años, estuviera a punto de hacer historia.

El ambiente en el estadio del colegio era eléctrico. Padres, profesores, compañeros de clase y otros jóvenes jugadores llenaban las gradas, ansiosos por ver lo que se prometía como un duelo emocionante.

Pero además de los habituales espectadores, también había aficionados y periodistas que se habían enterado de que el hijo del gran Lionel Messi estaría en acción.

Desde el inicio, todo el mundo tenía los ojos puestos en Thiago, quien lucía tranquilo, concentrado y completamente enfocado en el juego. El primer gol llegó temprano, a los 10 minutos del primer tiempo.

Todo comenzó con un pase rápido desde el medio campo. Thiago controló el balón con una destreza sorprendente, dejó atrás a dos defensores con un regate preciso y con un remate certero envió el balón al fondo de la red.

La precisión de su disparo y la velocidad con la que ejecutó la jugada dejaron al estadio en silencio por un segundo, como si todos necesitaran procesar lo que acababan de ver. Luego, el estallido de aplausos y vítores llenó el aire.

Pero esto solo era el comienzo. Pocos minutos después, Thiago anotó su segundo gol. Si el primero había sido impresionante, este segundo fue una verdadera obra de arte.

Tras recibir un pase en profundidad, Thiago enfrentó al portero rival. En lugar de lanzar un tiro potente, optó por algo mucho más elegante: una vaselina sutil que elevó el balón apenas por encima del arquero, dejándolo sin opción.

El balón describió una parábola perfecta y cayó suavemente en la red. Los presentes quedaron asombrados; era como ver a su padre en uno de sus mejores momentos. Pero esta vez, el protagonista era su hijo.

El tercer gol, el que completó su hat-trick, llegó en el minuto 75 y fue el que realmente selló este día como uno de los más importantes en la joven carrera de Thiago. Con su equipo ya dominando el partido, Thiago recibió el balón cerca del área grande, rodeado por tres defensores.

Parecía que no tendría espacio para moverse, pero con una habilidad sorprendente, esquivó a todos con movimientos rápidos y precisos.

Justo cuando parecía que no tenía ángulo para disparar, sacó un remate cruzado que fue directo al ángulo superior derecho. El portero ni siquiera tuvo tiempo de reaccionar. El estadio estalló en una euforia total y sus compañeros de equipo corrieron a abrazarlo.

Thiago había logrado su hat-trick, pero lo que más impresionaba era la calidad de su juego, su madurez y la serenidad con la que enfrentaba la presión. Las redes sociales no tardaron en hacer eco de lo que había sucedido.

Lo que comenzó como un rumor local, se transformó en una noticia mundial en cuestión de horas. Aficionados del fútbol de todos los rincones del planeta comenzaron a compartir videos del partido, asombrados por el talento de este joven Messi.

Incluso los medios de comunicación más importantes destacaron la actuación de Thiago, con titulares que iban desde “Thiago Messi, el futuro del fútbol” hasta “La nueva joya del balompié mundial”. Pero si algo faltaba para hacer este momento aún más especial fue la reacción de su padre, Lionel Messi.

El astro argentino, que no pudo estar presente en el partido debido a compromisos profesionales, no tardó en expresar su orgullo a través de sus redes sociales. Publicó una foto de su hijo con el mensaje: “Estoy muy orgulloso de ti, Thiago. Sigue trabajando duro y disfrutando del fútbol. Eso es lo más importante.”

Las palabras de Lionel resonaron en millones de corazones, y los fanáticos de todo el mundo se unieron a la celebración. Aunque Thiago Messi es aún muy joven, su actuación en este partido dejó claro que el talento está en su ADN.

Las comparaciones con su padre son inevitables, pero lo que más sorprendió a quienes presenciaron el partido fue su capacidad para liderar a su equipo, su visión de juego y su habilidad técnica.

Los rumores sobre su futuro comenzaron a intensificarse. Algunos informes indican que varios clubes juveniles importantes ya han mostrado interés en seguir de cerca su desarrollo.

Aunque la familia Messi siempre ha sido muy cautelosa con las decisiones que afectan el crecimiento de sus hijos, de cualquier manera, el partido del 10 de septiembre de 2024 ha quedado grabado en la historia como el día en que Thiago Messi no solo estuvo a la altura de su apellido, sino que comenzó a forjar su propia leyenda en el mundo del fútbol.

A medida que la noticia se esparcía, clubes europeos de renombre, como el FC Barcelona y el Paris Saint-Germain, comenzaron a expresar su interés por seguir el desarrollo de Thiago de cerca.

Incluso algunos exjugadores y entrenadores comenzaron a elogiar públicamente al joven Messi, asegurando que si sigue este camino, podría convertirse en uno de los jugadores más importantes de su generación.

Lo que hace esta historia aún más fascinante es que Lionel Messi ha sido un modelo a seguir para millones de jóvenes futbolistas en todo el mundo, y ahora su hijo está siguiendo sus pasos. No obstante, las expectativas que rodean a Thiago son inmensas, pero hasta ahora ha mostrado una increíble capacidad para lidiar con la presión.

A pesar de su corta edad, su enfoque, disciplina y pasión por el juego son características que lo diferencian de otros niños de su misma edad.

En las próximas semanas, se espera que el nombre de Thiago Messi continúe apareciendo en los titulares. No solo por sus habilidades en el campo, sino también por las decisiones que tomará su familia sobre su futuro deportivo.

Sin duda, será interesante ver cómo evoluciona su carrera y si, en el futuro, logra alcanzar las alturas que su padre alcanzó en su legendaria carrera.

Lo cierto es que el mundo estará observando muy de cerca cada uno de sus movimientos. Thiago Messi, a pesar de su juventud, ya ha dejado claro que está aquí para quedarse y que el legado de los Messi en el fútbol está lejos de terminar.